El espionaje cibernético es un tipo de ataque cibernético en el que un usuario no autorizado intenta acceder a datos sensibles o clasificados o propiedad intelectual (PI) con fines económicos, ventaja competitiva o políticos.
El espionaje cibernético se usa principalmente como medio para recopilar datos sensibles o clasificados, secretos comerciales u otras formas de PI que el agresor puede usar para obtener una ventaja competitiva o venderlos para obtener una ganancia financiera. En algunos casos, el uso indebido es simplemente para causar daño a la reputación de la víctima al exponer información privada o prácticas comerciales dudosas.
Los ataques de espionaje cibernético pueden estar motivados por ganancia monetaria; también pueden desplegarse en conjunto con operaciones militares o como un acto de ciberterrorismo o guerra cibernética.
El impacto del espionaje cibernético, especialmente cuando forma parte de una campaña política o militar más amplia, puede llevar a la interrupción de los servicios y las infraestructuras públicas, así como a la pérdida de vidas. La diferencia entre el espionaje y el cibercrimen es que el primero se relaciona principalmente con gobiernos, mientras que el segundo proviene de individuos que intentan obtener datos personales para usarlos como engaño para obtener fondos o información valiosa.
El espionaje cibernético a menudo se realiza a través de programas maliciosos diseñados para extraer información de manera silenciosa a través de una computadora o dispositivo. Los programas maliciosos también se utilizan para llevar a cabo ataques de cibercrimen para robar información confidencial, como números de tarjetas de crédito. Los servicios de espionaje cibernético están disponibles para los gobiernos para ayudarles a obtener información y acceder a datos sensibles.
El software Pegasus, desarrollado por la compañía israelí NSO Group, es uno de los programas de espionaje cibernético más populares. Esta plataforma se ha utilizado para espiar y controlar dispositivos Android e iOS, como teléfonos inteligentes y tabletas. El equipo de Pegasus también puede usarse para interceptar llamadas, correos electrónicos y mensajes, y para ver fotos y videos de los dispositivos. En general, es claro que el espionaje cibernético y el cibercrimen vienen de fuentes diferentes, con diferentes propósitos y métodos.