Aunque la era postdigital ha traído muchos avances positivos, también ha dado lugar a importantes retos y aspectos negativos. He aquí algunos de los principales:
Vigilancia: La era postdigital ha permitido unos niveles de vigilancia sin precedentes, con gobiernos y empresas recopilando ingentes cantidades de datos sobre nuestras vidas. Esto ha suscitado preocupación por la privacidad y las libertades civiles, así como por la posibilidad de que estos datos sean mal utilizados o explotados.
Capitalismo de datos: La recopilación y monetización de datos personales se ha convertido en una gran industria, con empresas como Google y Facebook que recurren a la publicidad dirigida para generar ingresos. Esto ha dado lugar a una nueva forma de capitalismo, en el que los datos personales se consideran una mercancía valiosa que se compra y se vende.
Dataficación: La era postdigital también ha llevado a la “dataficación” de nuestras vidas, donde cada aspecto de nuestro comportamiento se convierte en puntos de datos. Esto ha llevado a una reducción de la privacidad y la autonomía, así como a una pérdida de la agencia y el control humanos.
Brecha digital: Aunque la era postdigital ha permitido una mayor conectividad y acceso a la información, también ha creado una brecha digital entre los que tienen acceso a la tecnología y los que no. Esto ha provocado desigualdades en la educación, el empleo y la sanidad, así como una pérdida de cohesión social.
Acoso en línea: El anonimato y la distancia que proporciona Internet también han provocado un aumento del acoso en línea, el trolling y la incitación al odio. Esto ha creado entornos tóxicos en línea, donde la gente se siente insegura y no bienvenida.
Sobrecarga de información: Con la enorme cantidad de información disponible en Internet, la gente puede sentirse abrumada y encontrar difícil navegar y dar sentido a lo que es relevante e importante.
Amenazas a la ciberseguridad: La creciente dependencia de la tecnología digital también nos ha hecho más vulnerables a las amenazas de ciberseguridad, como la piratería informática, el robo de identidad y los ataques de ransomware.
Adicción digital: El acceso constante a la tecnología digital ha provocado un aumento de la adicción digital, en la que a las personas les resulta difícil desconectarse de sus dispositivos y siempre están conectadas.
Repercusiones en la salud mental: La era postdigital también ha traído consigo problemas de salud mental, como ansiedad, depresión y aislamiento social, que se han relacionado con el exceso de tiempo frente a la pantalla y las presiones de las redes sociales.
Aunque la era postdigital ha traído muchos beneficios, también ha creado importantes retos y aspectos negativos. La vigilancia, el capitalismo de los datos y la “dataficación” son sólo algunas de las cuestiones que deben abordarse para garantizar un uso responsable y ético de la tecnología.