Los rastros digitales se pueden clasificar en diferentes tipos según la naturaleza y la fuente de los datos. Aquí hay seis tipos comunes de huellas digitales:
Rastro digital pasiva:
este tipo de Rastro digital se crea sin la intención o el conocimiento del usuario. Incluye información que se genera automáticamente, como cookies, historial de navegación y direcciones IP.
Rastro digital activa:
este tipo de rastro digital se crea cuando una persona comparte información con otros en línea a sabiendas. Los ejemplos incluyen publicaciones en redes sociales, artículos de blogs y comentarios en foros en línea.
Rastro digital de identificación personal:
este tipo de rastro digital incluye información que está vinculada al nombre real de una persona u otra información identificable, como la dirección de correo electrónico o el número de teléfono. Esto puede incluir información compartida tanto activa como pasivamente.
Rastro digital anónima:
este tipo de rastro digital oculta la identidad de una persona, a menudo mediante el uso de herramientas como la navegación anónima o las redes privadas virtuales (VPN).
Rastro digital de entrada del usuario:
este tipo de rastro digital se genera como resultado de las interacciones de un individuo con plataformas y servicios en línea, como consultas de búsqueda, clics y compras.
Rastro digital de datos de sensores:
este tipo de rastro digital es creada por sensores y otros dispositivos que recopilan datos sobre el entorno físico de un individuo, como rastreadores de actividad física o dispositivos domésticos inteligentes.
Cada tipo de huella digital brinda una perspectiva diferente sobre la actividad en línea de un individuo y puede ser utilizada por empresas, anunciantes y otras organizaciones para crear un perfil del individuo. Al comprender los diferentes tipos de huellas digitales y tener en cuenta la información que comparten en línea, las personas pueden ayudar a proteger su privacidad y seguridad en línea.